viernes, 9 de abril de 2010

Y de lo que aportó la visita al infierno, no me pareció...

“Si el diablo me ofrece una entrevista voy a los infiernos,” es la frase de justificación de Scherer por su relato sobre un encuentro del aclamado periodista con El Mayo Zambada. No es una mala analogía, ya que siendo realistas en el mundo del periodismo ¿quién podría negarse a encontrarse con uno de los hombres más buscados y peligrosos del país, líder de uno de los cárteles más fuertes que han transformado la vida de toda una Nación. Pareciera incorrecto, incluso no ético, pero tomando la metáfora de Scherer es lo que un buen periodista haría. Siempre tenemos la versión de Dios en la Biblia, pero nunca la del Diablo. En una guerra como la que vive este país, es de interés público conocer todas las caras posibles. Admitámoslo, si somos de aquellos a los que nos gusta interrogar al mundo, no nos escapamos de la curiosidad y de preguntarnos: ¿qué es lo que piensa un capo? ¿qué pasa por su cabeza? ¿por qué hace lo que hace?
En fin, siento que la mayoría que quisiéramos conocer lo que tiene que decir el diablo; porque pensamos que de esta manera llegaremos a entender la vida de un territorio que nunca se ha cansado, o más bien al que no le ha sido posible escapar de la sangre y la violencia. Para mí el relato de Scherer es un intento por alimentar a la población ávida por conocer formas de sobrellevar la existencia en esta telaraña en la que nos encontramos hoy en día. No obstante, en mi opinión no lo logra; es fiel a su crónica, a su experiencia y eso es fundamental; siento que ni si quiera lo puedo criticar. ¿Cómo hacerlo? El miedo debió estar presente, después de todo se trata de un intento de entrevista con un asesino que declara ser un simple agricultor; pero que en cualquier instante puede aniquilarte, y entonces ¿en dónde queda lo poquito que puedes compartir con el resto de la sociedad?
Empero, como lector, no encuentro sustancia. Sólo veo al capo mostrando su poder: citando a uno de los periodistas con trayectoria más notables de la República, comentando lo que él quiere dar a escuchar (interrumpiendo cualquier intento del entrevistador por sacar información valiosa) y diciéndole a todos que el poder lo tienen ellos y no hay nada por hacer. Si un capo muere, otro está ahí para reemplazarlo y nosotros la población civil, al parecer tendremos que acostumbrarnos a ello. Mientras tanto, nos demanda a verlo con compasión, como un ser humano que por miedo a ser atrapado, no puede compartir la alegría familiar. Pero me pregunto yo ¿qué tan humano lo puedo ver? cuando sus acciones y las de sus similares, han llevado a mi país a una inseguridad en donde no se escapa del temor; y en donde cualquier civil es blanco de una “guerra” sin precedentes.

martes, 9 de marzo de 2010

¡Yo Quería Estar Ahí!

Por Tania Tripp
Sentada en el escritorio del profesor, con una mano en el mouse para pasar el SAPPA y la otra jugueteando con un cafecito instantáneo de Nescafé. Así es como Alma Karla Sandoval, poeta, periodista y profesora mexicana, les da la bienvenida a su grupo de estudiantes de periodismo, que están a punto de entrevistarla. Con una confianza familiar, Karla brinda una entrada a su mundo y a su vida; de tal forma que sus estudiantes, no sólo practiquen las técnicas periodísticas, sino también conozcan un poco más a fondo la verdadera esencia de una magnifica humanista.
“Un decir es un hacer, dice Octavio Paz” así es como comenzó la fluida entrevista, en que estudiantes y profesora conversaron acerca del lenguaje, la poesía y el viejo vejestorio. Para conocer un poco más sobre el amor a letra, a la palabra que tiene Alma Karla; no quedó más remedio, pero que preguntarle. Tomando un sorbo de café, y moviendo los brazos como en posición de arranque, la entrevistada sonríe un poco y empieza a compartir su vida y pensamientos con extrema elegancia y sabiduría.
-¿Crees que la palabra es factor de cambio?
Las palabras son actos, son consunciones y consumaciones y pesan tanto como los hechos; al menos para alguien que está comprometido con el lenguaje, como yo. Si no hubiera sido de la palabra, quién sabe qué hubiera sido de Sócrates (que nunca escribió nada) de Jesucristo, y de los más grandes líderes. No sólo cambia, no sólo transforma, sino también aquieta. La palabra tiene un poder, creo todavía incompresible. Foucault escribe que el lenguaje también se ha utilizado como instrumento de control y de dominio; es como todos los poderes y todas las cosas dependiendo de la intención en que las uses. El hablar es lo que cura; es un poder reivindicatorio. Cito a Frost “para no morir darse cuenta de que no había vivido”. Vida en la palabra.
“Quién dijo que no se puede mezclar la realidad con la ficción y con la literatura.” Rápidamente la conversación se desvía al debate de lo que representa esta artista. Poeta y Periodista, lo que pareciera una bella controversia, entre realidad y ficción; pero que en realidad conforma una fusión perfecta de creación. He aquí una de las pasiones de la entrevistada. Se agita un poco y empieza a mover los brazos, juguetear con los papeles que tiene en frente y hablar un tanto más rápido.
-Tú que trabajas en el periódico pero también escribes, ¿qué prefieres hablar de lo real o de los cuentos?
-Las dos cosas. Los escritores que provienen del universo del periodista, los escritores que se han formado en las salas de redacción, son una extraña raza de autores que es invencible; es invencible porque tienen en una mano el peso del mundo con su realidad amarga, y por otra también las alas de la ficción. Poder mezclar las dos cosas, me parece es quizá la fórmula para conseguir una obra inolvidable. Nombro ejemplos de Ganadores del premio nobel, que forman parte de esta extraña raza de escritores: Hemmingway, Herta Muller, Gabirel GarcÍa Márquez. Hay un matrimonio rico, portentoso entre la literatura y el periodismo; y son dos pasiones a las que difícilmente se puede renunciar.
“¿Qué dosis literaria es la que contiene el periodismo?” Repentinamente, la entrevistada se vuelve la entrevistadora. Se responde a sí misma “El estilo; no puedes cambiar los hechos, pero si puedes decirlos con elegancia, con pulcritud, con agilidad. Manejar la forma en que se escribe, con la sintaxis exquisita.“ Es como si no perdiera el toque de estar dando una cátedra; y de momento confunde, uno se pregunta ¿si la Alma Karla que está hablando, es la entrevistada o es la profesora? La inquietud de este hecho nace en uno de los estudiantes que busca distinguir que tantas máscaras propone esta literata. Sin embargo, sólo llega tener una respuesta clara y directa: no hay máscaras, Karla no es una persona diferente en el salón de clases a la que es con su familia. Dice: “soy maestra cuando estoy con mi herma, soy poeta y soy hermana cuando estoy dando clases.” Sin embargo, falta encontrar más acerca de la esencia de Karla; y así la entrevista se desvía en temas diversos, tratando de encontrar una entrada a la vida de esta escritora.
-¿Cómo ves la creación literaria en Morelos?
-Hablemos con la verdad, la creación literaria en Morelos no ha merecido el reconocimiento que merece. Es difícil que te de una opinión objetiva, pero lo intentaré. Ya que yo si he tenido ese reconocimiento. Cuando se habla de poetas morelenses, yo se que va mi nombre. Sin embargo, reconozco que hay otros autores a los cuales no se les ha dicho usted es bueno, usted debe estar acá. Creo que hacen falta talleres literarios, yo me siento culpable porque creo que es una labor de promoción y de coaching que no he hecho. Y esa labor es una meta que tengo a nivel profesional.
“Sí. No, no, la vida sin pasión para que la quieren.” Más tarde entra otro debate, acerca de la pasión, la entrega y la apatía. Nuevamente Karla se prende. Se mueve y se acelera, empieza a jugar con la silla y a filosofar acerca de cómo hay que aprender a navegar en los mares de la pasión. Así vuelve a su plan de cátedra, diciéndoles a sus espectadores, como hay que encontrar el balance entre la razón y la emoción. “Yo he bailado con el demonio, tan rico tantas veces; pero el ángel me fascina. Cuando de repente me canso de bailar con el demonio, ahí está el ángel.”
-Hablando sobre la pasión y el quiero estar ahí, ¿Cuándo fue este quiero estar ahí para Alma Karla?
-Siempre quise estar ahí; yo tenía 8 años, y se acuerdan el Tío Gamboin. todos los días mi mamá me ponía a ver las caricaturas después de hacer la tarea y siempre decían que la carta de no sé quién, y saludos y esto y aquello. De repente no me aguante y yo escribí mi carta al Tío Gamboin. Yo sola me lo guarde como un secreto oscuro y de repente pasa un mes, y me sienta mi mamá, y de repente que dice “Qué bonita carta de Alma Karla Sandoval.” Y mi mamá escuchó. Entonces creo que fue de las primeras veces, después en primaria, hay un concurso; y llegan a mi escuela y todos los niños escriben como una tarea. Escribí sobre lo que puedo hacer para ayudar a mi familia. Les gusta mucho el texto y represento a mi escuela y después a mi zona, y de los 11 que escogen, van con Miguel de la Madrid. ¡Yo quería estar ahí!
“Y esto se ha repetido toda la vida, y hasta ahora no ha habido nada que no haya podido llegar. Lo digo no con presunción lo digo con sorpresa, no he sabido cómo me he salido con la mía, aún no lo sé.” Sigue la entrevista, y Karla continúa con sus mismos juegos corporales, mueve las hojas, juega con su pelo, ve al aire, se muestra inquieta; pareciera como que se encuentra comiendo la vida todo el tiempo. La entrevista termina, y para una de sus entrevistadas lo único que sigue repitiéndose en su mente es esta idea: ¡Yo quiero estar ahí!

Semblanza de Alma Karla Sandoval

Una poeta, una periodista, una profesora, y ninguno lo sacrificaría; el quererlo todo y saber que se puede, es una de las tantas características que conforman al encantador ser humano que es Alma Karla Sandoval. Nacida en Zacatepec, Morelos en 1971, es egresada de la renombrada Escuela de Periodismo Carlos Sentién García y de la Escuela de Escritores de la SOGEM. Enamorada de las letras y el arte, es Maestra en Literatura Latinoamericacna por la Universidad Javeriana de Bogotá y tiene una Especialidad en la Enseñanza del Español como Lengua Extranjera por la Universidad Complutense de Madrid. A la par su amor por la docencia, la ha convertido en una de las profesoras más dinámicas y elocuentes del Tecnológico de Monterrey, Campus Cuernavaca, en el área de humanidades. Por si fuera poco, es una periodista activa que colabora con la Jornada de Morelos y el Semanario Maseual. Recientemente recordada por su presentación del poemario “La Última Escarcha” en 2009, ha publicado una serie de obras, algunas de las cuales han la dado la vuelta al mundo a través de la impresionante y oscura red digital. Entre algunas de sus publicaciones se encuentran: Corredor de las antorchas (2000) Del silencio hacia la luz: Mapa poético de México (2007) y Mujeres Poetas en el País de las Nubes (2008). Con un inmenso talento y una magnifica personalidad que invita a la conversación, Alma Karla es sin duda una persona a la que uno busca conocer y ver que sorpresas tiene para mostrar.

“Azul es Vida”

Por Tania Tripp

Al momento de la verdadera contemplación, de la conexión mística, los distintos expertos han declarado haber visto una luz azul. Así concluye el poeta y profesor Afhit Hernández, a una pequeña entrevista, realizada por parte de un grupo de estudiantes del Tecnológico de Monterrey, Campus Cuernavaca. En menos de una hora, y con pocas preguntas lanzadas al aire, Afhit llega a cautivar al grupo de jóvenes; quienes se dejan llevar por el flujo de la conversación. Al final, no sorprende, que este Licenciado en Letras Hispanoamericanas logre llevar a sus espectadores a una reflexión sobre la contemplación, el valor de la poesía y a interesarse, tan siquiera un poco, en los secretos de la mística.
“Cuando las teorías se populizan, se degradan.” Afirma Afhit, cuando se hace un comentario generalizando a la mística. El poeta argumenta, que es común que en muchos ámbitos las ideas lleguen a popularizarse al grado de que pierden su verdadero sentido; por ende se cae en cuestiones, como decir que el sacrifico es una parte esencial del misticismo. “Todos se creen socialistas, pero ninguno ha leído a Marx; Todos se creen psicoanalistas, pero ninguno ha leído a Freud.”
-¿Qué es para usted la poesía mística?
La mística es una vena del ser humano. La mística es una vena del ser humano que debería investigarse desde un punto de vista etnológico, antropológico primero, psicológico después y literario por último. Lo místico es lo sagrado, la experiencia que vive un ser humano, y que a veces no puede expresar con claridad y que entonces se guarda para sí. Ahí es donde entra la literatura, que es aquella que recoge esa experiencia que vivió el ser humano.
“La belleza es también ese lugar, el que uno no puede pisar sin que uno sienta de algún lado, de alguna manera el riesgo de morir.” Tomando como referencia a Robert Bartra el poeta afirma que la belleza es como lo sagrado. Y que esto es lo que construye la base de la poesía misma. Es aquello que sobrepasa la cotidianidad y nos obliga a ir más allá.
-¿El misticismo es algo que se debe de vivir toda la vida?
Esto es algo que no tengo la autoridad de decir. Hay personas que lo han hecho, pero hay otras que sin ningún tipo de preparación, van caminando y les llega. Es una sensibilidad que llega y no necesariamente tengo que ser un místico para vivirlo.
“La belleza es objetiva.” Empieza un pequeño debate, cuando se habla sobre la belleza, como fin último de la poesía. Algunos argumentan su subjetividad, pero para Afhit esto no es posible. El habla sobre los posibles universales, y como uno de ellos es en sí la belleza. La belleza como lo sagrado, que es ya en sí, una necesidad ontológica del hombre. Lo que difiere entonces, es el gusto. “Unos pueden amar el Mio Cid, otros lo pueden odiar. Pero el gusto no es un argumento”. Este se refina, se educa, y a parte la belleza no puede ser una opinión.
-¿Cómo fue que te envolviste en el misticismo?
Esa era la pregunta que no quería que me hicieran. La verdad es que en un principio ni me interesaba, pero lo que paso es que conocí a un gran gurú. Estaba estudiando y llego a México uno de los santos más grandes de la India. Mis amigos querían ir; a mí me daba flojera pero al final fui. Al principio iba un poco forzado pero cuando me pare en frente de esta mujer pequeñita, yo, y me importa un cheto lo que digan, yo sentí algo, algo grande, tan grande que seguí escuchando campanitas por un buen rato. Después de eso me puse a investigar acerca de ello y sólo pensaba que había perdido mucho tiempo.
“La poesía mística es el vacio o más bien es el silencio del alma.” Para Afhit la mística parece ser o una renuncia o un exceso. Por ello da ejemplos, de místicos que han encontrado este más allá, o estado de contemplación a través de ambas vías. Una, la del sacrificio total, como algunos fanáticos cristianos, que inclusive se flagelan para encontrar esta unión, que el poeta describe como una fusión con el todo. Otros la encuentran a través del exceso de lógica, como Russel, quién llega al misticismo a través del cuestionamiento de la lógica. “Somos sabios pero tenemos que darnos cuenta.”
-¿No te causa cierta frustración que siendo poeta la palabra sea una limitación no poder decir lo que sentiste con palabras?
La palabra limita, limita siempre, porque el concepto es eso: una limitante. A los poetas les gusta decir que la palabra no alcanza, pero no es cierto. La poesía, la poesía es otra onda. La poesía no es lógica, no es discursiva, no es racional. Hay una poesía filosófica que narra una experiencia que es imposible de trasladar en el lenguaje común y cotidiano, que es la experiencia mística. Lo importante de la poesía es la forma de abordar.
La conversación cae en redundancia y en medio de un juego de asociación de palabras Afhit dice que el “azul es vida.”
-En su blog he observado que todo tiende hacia el color azul. ¿Por qué el azul?
Muchos de los grandes místicos dicen que al llegar a la contemplación han visto una luz o un punto azul. Santa Teresa en su libro de la vida dice, que una de sus oraciones, se oscureció su visión y lo que pudo ver fue una perla azul. Viene ligado a lo místico; lo que ves en medio de la oscuridad es una luz azul.
Finalmente, la luz azul es vida. Sin embargo, éste no parece ser la verdadera esencia de la mística. Afhit dice que la constante de la mística, yace en la pérdida de la noción de individualidad. “El yo no existe, te conviertes en Dios.”

La cámara cinematográfica como portavoz de los indefensos

Por Lizette Davies

Jugueteando con una cámara fotográfica y bebiendo café capuchino deslactosado, desde una terraza de la costa caribeña, es como me encuentro con Q’Tripp. La cineasta me recibe con una gran sonrisa y me invita a disfrutar de la brisa marina. Parece una sofisticada detective, que no para de observar cada detalle que pasa a su alrededor, como esperando el momento de la composición perfecta para captar. Es por ello que me resulta claro, como fue posible para Q’Tripp lograr utilizar su pasión por la imagen y adaptarlo a un proyecto social de índole internacional.
“Me encanta el Viejo San Juan” me dice, “es la perfecta fiesta boricua; te rodeas de una hermosa arquitectura, gente alegre, una gastronomía exquisita y el calorcito caribeño perfecto con olor a mar.” En ese instante toma su cámara, se asoma por el barandal y captura una imagen, regresa a su asiento, deja la cámara y disfruta de su café. Estaba a punto de preguntarle, que era lo que acababa de retratar, cuando por la confianza adquirida, decido comenzar la entrevista con un “¡Cámara, Luces, Acción!” Tania esboza una larga sonrisa y se prepara para la sesión.
-¿Cómo fue que nació tu amor por la imagen?
-Realmente creo que mi amor por la imagen era mi destino, pero también creo fue la influencia de mi padre. A él siempre le apasionó la fotografía y el arte, y desde que fui una bebé me vi atacada por el lente de una cámara. Digo atacada porque realmente mi papá parecía un paparazzi que buscaba captar cada movimiento que su bebé hacía. Así que mi primer acercamiento con la imagen fue el de ser una modelo cotizada, que a la vez buscaba jugar con ese objeto que tenía mi padre en las manos. Cuando por fin pude entender lo que era una cámara, mi papá empezó a instruirme en el asunto. Cada que salíamos de viaje, me daba la cámara para que yo filmara o tomara las fotos de lo que estaba conociendo. Un tiempo después decidió inscribirme en una clase formal de fotografía y desde ahí fue que yo sola seguí buscando mi propio camino por los medios de la imagen.
“Recuerdo un video que tengo de bebé, en que estoy en la playa comiendo arena, y mi papá fascinado filmándome, ni siquiera se acerca a detenerme.” Me dice Tania, con una mirada que está fija en sus memorias. Después comienza a reír con un ánimo que te invita a acompañarla en su alegría. Después de unos minutos, toma una bocanada de aire, se dirige hacía mi y grita dulcemente. “Después del pequeño corte. ¡Acción!”
-¿Porqué elegiste el cine como tu mayor medio de expresión?
-La verdad, es que fue algo predestinado también. Cuando me gradué de la Universidad, estaba un poco insegura sobre lo que haría después. Esto, a causa de que todo me gustaba: el diseño, el periodismo, el radio, la tele, la comunicación política, etc. Sin embargo, después de cómo unos dos meses sabáticos y de meditación, me di cuenta de que no podía darle vueltas al asunto, que lo mío era el cine. Mi papá me instruyo en la imagen, pero fue mi mamá la que me hizo amar el cine. Desde que tengo memoria mi mamá y yo, nos la vivíamos en la sala de cine, rentando y comprando películas. Había veces que incluso veíamos hasta 3 películas seguidas, sin parar. Y fue poco a poco, como me fui dando cuenta, que yo ya no sólo quería ser un espectador en la sala de cine; yo quería estar ahí detrás, haciendo todo el largometraje. Literalmente todo, yo quería actuar, dirigir, fotografiar, editar, escribir el guión; y fue un sentimiento que permaneció allí siempre, pero por alguna razón lo había dejado medio escondido. Después de graduarme, decidí que debía intentarlo, aunque no lo lograra. Ya que el cine era la representación máxima de la imagen para mí, y si no me arriesgaba, me quedaría con la duda para siempre. Así que con toda la voluntad del mundo, llene mi solicitud para entrar a NYU y la mande. Un semestre después le estaba diciendo “Hello!” por primera vez a la Gran Manzana.
“De todo el tiempo en que estuve en Manhattan, tengo un simple remordimiento. ¡Nunca visité el Actor’s Studio!” Noto una pequeña frustración en su cara ante dicha declaración. Sin embargo, el momento pasa y vuelve a sonreír cuando el mesero llega con unos brownies a la mesa. Le da las gracias al joven y toma un brownie para darle una pequeña mordida. “¡Nada como el chocolate, para ponerte feliz, en un segundo!”
-¿Cómo fue que nació el proyecto de “Mi Voz a través de la Gran Pantalla”?
-La idea de este proyecto, fue resultado de una de mis clases de fotoperiodismo en la universidad. Recuerdo nos pusieron a ver el documental de “Nacidos en el Burdel” y terminé fascinada con la idea de Briski; eso de que el niño que sufría mostrara a través de la imagen su percepción del mundo y logrará un impacto en la sociedad, me pareció maravilloso. Yo quería hacer algo similar, pero aún no tenía la fuerza y la voluntad necesaria para llevarlo a cabo. Fue hasta mis vacaciones del 2 año de trabajo, que decidí empezar a formalizar el proyecto, y cambiar la idea de Briski a mi propia manera. Así en vez de fotografía fija, yo quería instruir a los niños en el uso de la cámara de video, para la realización de documentales, hechos por ellos mismos, que fueran llevados a la Gran Pantalla y así su historia fuera vista por millones de espectadores. Sin embargo, como apenas comenzaba a incursionarme en el medio, no muchos se interesaron en mi idea. Cuando gané mi segundo premio en Cannes, fue cuando pude por fin comenzar en serio el proyecto. Ahora, con la ayuda de otros cineastas e inversionistas, pudimos llevarlo en grande y se creó la fundación.
“La verdad espero que todo salga bien, porque ésta creo será una de mis mayores aportaciones de labor social; algo que siempre me ha resultado un poco difícil.” Me dice mirando al reloj. Mi tiempo para la entrevistarla ha acabado, pero Tania me invita a charlar un rato más. Dice “Mi mayor pasión es la conversación, así que todavía da tiempo para un segundo cafecito.” Se pasa el tiempo de volada y aunque la terraza y la brisa del Caribe hipnotizan, Tania tiene otros compromisos que atender. A la salida del café, con el son de las despedidas, Q’Tripp vuelve a tomar su cámara y de improvisto me toma una fotografía. “¡Un recuerdo de mi entrevistadora Caribeña!” me dice con una gran sonrisa, después se la cuelga en el brazo y desaparece por uno de los callejones del Viejo San Juan.

Semblanza Fantástica sobre una Artista Multifacética

Tania Tripp Rojas, la multifacética artista, mejor conocida bajo el seudónimo de Q’Tripp, nació el 3 de Junio de 1989, en la ciudad de la eterna primavera y la eterna controversia, Cuernavaca, Morelos, México. Desde su niñez estuvo fascinada con el mundo de la imagen, la cinematografía y el entendimiento humano. Después de haberse licenciado como comunicóloga y fotógrafa, Q’Tripp incursionó en el teatro por un periodo de 3 años, mientras llevaba a cabo una maestría en estudios fílmicos en Nueva York. Después de unos años de trabajo, inició un proyecto personal en el que trataría de cambiar al mundo a través de la imagen. El proyecto, basado en el trabajo de la fotógrafa Zana Briski (creadora de un documental que retrata la realidad de los niños hindúes nacidos en los burdeles), consiste en capacitar a niños que viven en condiciones desfavorables en el uso de la cámara cinematográfica, para que ellos mismos tengan el empoderamiento de alzar la voz y ser escuchados. Sin embargo, este proyecto personal de la artista, progresó mucho más, después de algunos de sus éxitos y logros en el mundo cinematográfico. Q’Tripp ha sido ganadora de múltiples premios de Cannes, Sundance, Festivales Internacionales, y los aclamados Premios de la Academia.

Guionista, fotógrafa, actriz y productora, Tania Tripp, por fin ha logrado la culminación de su proyecto personal. Este mes la cineasta ha creado la fundación “Mi Voz a través de la Gran Pantalla”; dedicada a ayudar a los niños que viven situaciones de pobreza en su país, a través de la imagen. Tal como su proyecto, se enseña a los niños a utilizar la cámara para retratar su vida y así alzar la voz, pero a la vez se consigue ayuda internacional y el apoyo suficiente para brindarles educación y la posibilidad de cambiar su futuro. Sin embargo, con una trayectoria espectacular, éste parece ser sólo el inicio de un sinnúmero de proyectos que esta multifacética artista es capaz de realizar.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Bogart en la encrucijada humana

El ser humano –complejo e indescifrable- puede llegar a ser víctima de la ambición, pero también puede ser capaz de redimirse. Humphrey Bogart, el filme de 1956 “The Harder they Fall,” toma el papel de un héroe a la griega; que tras haber sucumbido a la tentación, logra retomar su camino a la rectitud. Bogart representa a un periodista reconocido –Eddie Willis- que ha perdido su empleo y al verse en bancarrota decide sumergirse en la mafia del box, en vez de aceptar un trabajo noble de mala paga. Luchando con su conciencia moral y justificando sus acciones de manera inédita, Willis cae en un juego de manipulación y estafas; las cuales lo llevan a prestar sus conocimientos de los medios para crear una ilusión rentable. Así es como logra convertir a Toro Moreno –un boxeador novato, inepto e ignorante- en una celebridad mediática. Incluso podría decirse que Moreno es un tipo de “Juanito mexicano”, perteneciente al mundo del box y no de la política.

Más aún, los mafiosos del filme son una perfecta comparación de la corrupción mexicana. Tal y como muchos políticos y empresarios, éstos son personas que tergiversan las leyes a su beneficio; y para ello aplastan y golpean a los más bonachones y débiles. Así la película lleva a un debate ético que se tambalea entre los golpeados y los explotadores, el “dinero fácil” y el trabajo justo, etc. Sin embargo, como todo buen héroe humano, Willis cae y vuelve a levantarse, sacrificando todo –poniendo en riesgo su vida- y así salvando a Toro y ganándose el perdón. Finalmente, el filme clausura con broche de oro: tal y como fueron palabras y medios las que llevaron a la creación de la falsa imagen de Moreno, pueden ser éstas el conducto a la denuncia de un mundo tan corrupto y oscuro como lo es el del box. Así se le recuerda al auditorio acerca de lo que significa ser humano: frágiles y pecaminosos, pero siempre con la opción de la redención y el perdón.